lunes, 21 de enero de 2008

Que vengan nomás

¡Vendrán a decirme que baje los piés! Me dirán que él es muy joven para mí, que volver a casa en tren a la noche es demasiado peligroso para una chica. Dirán también que no son horarios para andar por aquella zona, y que estoy muy grande para estar jugando en el cordón de la vereda. ¡Psst, si te viera tu abuela! Qué mal que te quedan las malas palabras, con esa boquita, habráse visto. Vendrán a decirme que ya no estoy para correr por la calle descalza. ¡Que esos colores no combinan, que ese pullover ya está muy viejo! Y yo le diré al viento, hermano, que ya no tengo oídos para tantas pavadas...

No hay comentarios: